¡HOLA POTTERHEADS!
El otro día, buscando un regalo para un amigo, me crucé con una página que vendía merchandaising de todo tipo, incluido Harry Potter en todos sus niveles.
Todo son risas hasta que veo que el colgante cuesta cerca de 40.00$.
Así es que decidí dedicar mi triste vida a hacer un colgante de Las Reliquias de la Muerte y resultó que no parecía un moco, como esperaba.
Así se hace:
Como materiales necesitamos un rodillo, un cuchillo o utensilio afilado que corte, tijeras, cartón, masa para modelar (recomiendo Das Color Blanco, no necesita horneado) y utensilios de dibujo.
Comenzamos dibujando sobre el cartón, a la medida que queramos, trazamos la imagen del colgante.
Una vez esté listo, se recorta y nos quedamos con lo que sería el colgante pero trazado en cartón.
A continuación, cogemos una porción de la pasta blanca y la aplanamos con el rodillo (ancho del colgante al gusto). Colocamos la plantilla de cartón sobre la masa y comenzamos a cortar con los bordes.
Como esta masa no necesita horneado, se deja secar en un sitio seco y al aire libre. No tardará en tomar rigidez más de un día; una vez esto, podemos limar algún borde que de haya despuntado y pintarlo si queremos.
Yo, personalmente, lo pinté con tinta china que se quebró y dio un bonito efecto.
Esta masa tiene el inconveniente de que, una vez seca, no se puede mojar.
Le pasamos una cuerda y hecho, tenemos un colgante que nos vendían por 40.00$ que nos ha costado cerca de 9 euros.
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